
““Más agradece el enfermo la medicina que le cura, que no el consejo que le preserva”
Cita: Vicente Espinel

Todos los padres con hijos afectados por el TDA-H están siempre cuestionándose si están haciendo o no bien en medicar por los posibles efectos secundarios asociados a las pastillas. Sin embargo, a día de hoy, el uso de medicamentos, acompañado de terapia cognitivo conductual, sigue siendo uno de los tratamientos más efectivos en aproximadamente el 80% de los niños con TDAH. No obstante, hay padres que optan por caminos alternativos o complementarios, aunque aún no está probada su efectividad. Aquí exploramos algunos de estas terapias u opciones.
Indice
1. Neurofeedback o neuroterapia

Parece ciencia ficción, pero no lo es. Se llama neurofeedback: una terapia aplicada hace ya años a deportistas de élite y ejecutivos para mejorar la concentración y el rendimiento en momentos de alto estrés. A pesar de ello, este método, en el que se usan electrodos para medir la actividad cerebral, suscita un montón de preguntas: ¿para qué sirve el neurofeedback?, ¿tiene efectos secundarios?, ¿se puede hacer el tratamiento en casa?, ¿qué precio tiene?
El neurofeedback es un proceso en el que se muestran visualizaciones de la actividad cerebral en tiempo real para ayudar a enseñar la autorregulación del cerebro. Con este tratamiento se pretende potenciar el autocontrol. Entrenando al cerebro se busca reducir la impulsividad característica del déficit de atención o TDAH.
En cuanto a los efectos secundarios, estudios médicos indican que, si es demasiado larga, algunas personas pueden mostrarse fatigadas o agitadas, pero a largo plazo hay informes que demuestran mejoras en el paciente al que se le ha aplicado.
En cuanto a la pregunta de si hay que acudir a recibir las sesiones a un centro o si lo puedes hacer desde casa, lo más sorprendente es que se puede alquilar la máquina de neurofeedback para mayor comodidad. Existen sitios especializados que te alquilan las máquinas tras hacerte una sesión de demo.
¿El precio? Una sesión puede costar entre 40 y 100 euros, dependerá del centro. Pero en lo que sí hay que prestar atención es si el centro está homologado o es de confianza por que en los últimos años se ha detectado mucho intrusismo en la profesión, dado el interés creciente en este método.
Por último, decir qué el neurofeedback se puede aplicar a cualquier problema de aprendizaje dada su efectividad en potenciar las capacidades cognitivas.
2. Neurociencia y educación
¿Y qué más tiene en cuenta la neurociencia? Educaweb te da las claves:
La plasticidad del cerebro permite adaptarnos continuamente a lo que aprendemos y a la experiencia. Por tanto, nunca se puede pensar y menos estigmatizar a un alumno sosteniendo que no tiene capacidad de aprender y avanzar en el medio académico.
El trabajo cooperativo por encima del trabajo individual. Está demostrado que aprendemos más y mejor en interacción y cooperación social.
Atención a la presión que ejercemos en el estudiante: un nivel alto de estrés provoca un impacto negativo en el aprendizaje.
Las emociones afectan de manera positiva o negativa al cerebro y sus funciones.
Las experiencias directas hacen que las personas aprendan mejor.
Los ejercicios y el movimiento están directamente relacionados con el buen aprendizaje.
La música y el arte favorecen el aprendizaje y transforman el cerebro.
Si el profesorado consiguiera hacer foco en los siguientes puntos probablemente se conseguiría un mayor rendimiento de los alumnos. Por tanto, hay que tener siempre en cuenta:
Cambiar la forma de abordar al alumnado y provocar emociones para despertar su atención.
Valerse del arte para favorecer los procesos cognitivos.
Realizar experiencias multisensoriales y fomentar el juego y el movimiento para enseñar y educar.
Todas estas técnicas que parecen obvias han sido olvidadas a lo largo de los años dejando paso a la competitividad y presión en los centros académicos y colegios, lo que no favorece en nada al aprendizaje general. Afortunadamente, se está empezando a fomentar el crecimiento de un profesorado formado como “especialista en neuroeducación”, una de las profesiones docentes con más futuro.
3. Optometría, alimentación y estimulación auditiva
Muchas veces los niños con TDAH tienen otros problemas asociados como es la dislexia, la discalculia o trastornos en la alimentación. Es decir, unido al trastorno de atención se encuentran dificultades en la lectura, el cálculo y en sus hábitos y rutinas como el sueño y la alimentación . De ahí que hayan surgido otras disciplinas que se presentan como alternativas o complementos al tratamiento farmacológico.
Optometría: son sesiones de adiestramiento visual que intentan mejorar o desarrollar habilidades visuales.
Estimulación auditiva: está basado en el supuesto efecto beneficioso de diferentes tonos de música y sonidos.
Alimentación: los pacientes con TDAH suelen tener problemas con la alimentación y no adquieren los hábitos nutricionales hasta que son adultos. No está demostrado que una dieta equilibrada reduzca los síntomas del TDAH, pero sin duda al haber problemas alimenticios una dieta sana ayudará a compensar los desajustes que se producen en niños que, por regla general, tienen alteraciones del sueño que también inciden en sus rutinas alimentarias.
Aunque ha habido ensayos y estudios, ninguna de estas disciplinas ha encontrado evidencia científica suficiente sobre su efectividad.
4. Ajedrez “Jaque mate al TDAH”

No es casualidad que el libro del reconocido psiquiatra Hilario Blasco se denomine “Jaque mate al TDAH”. Si hay una terapia alternativa por la que el Doctor siempre ha apostado como refuerzo a la terapia farmacológica es el ajedrez, como así demuestran ya diversos estudios.
Al contrario de lo que pueda pensar un padre que no ve posible que la dificultad de concentración de su hijo sea compatible con un juego en el que hay que estar mucho tiempo sentado, se ha demostrado que el ajedrez es el único esfuerzo mental sostenido que realizan los niños sin resistencia alguna.
No obstante, el quiz de la cuestión es cuándo, cómo y quién imparte las clases. Si la introducción del ajedrez se da en un niño o adolescente cuyo TDAH está adecuadamente tratado, que muestra al menos algo de interés por el ajedrez, y el profesor o monitor de ajedrez es capaz de adaptar su enseñanza a las características del menor con TDAH, el ajedrez beneficiará, y mucho a su hijo. Véase más información en tdahytu para saber cómo y cuándo aconsejan introducirles este juego en sus rutinas.